Carola y Marlene. 22 y 19

Eran cerca de las tres de la mañana. Estaba en casa, viendo el programa de Bob Ross en la televisión cuando oí llegar a mi compañero de piso con más gente, pegando berridos y riéndose fuerte. Cerré rápido la puerta de mi cuarto y eché la llave. Me puse unos pantalones. Sonó mi puerta

-HAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAANSSSSSSSS

Abrí. Estaba mi compañero con tres colegas, un pivón, una gorda guapa de cara y un notas pasadísimo.

-Vámonos a casa de Chris a beber.
-No tio, estoy cansado, son las putas tres ¿no trabajas mañana?
-Si coño, a las 11 entro, venga vamos, están cachondas.

Me reí. Tenían cara de cachondas. Una se me pegaba al marco de la puerta e intentaba entrar a mi cuarto



-Sal coño
-¿Porqué hay un tío con el pelo afro pintando en tu tele?
-¿Porqué hay una borracha en mi puerta a las tres de la mañana?
-Eeeeh, tranquilo. Vente con nosotros .

Desistí, sabía que aunque me quedase se iban a quedar liándola en casa y no iba a poder disfrutar bien del show del señor Ross. Me puse una camiseta, unas zapas viejas, cogí dos botellas de vino y fuimos los cinco a casa de Chris.

Vivía en un primero. Era un piso que daba al parking de un hotel. Lleno de carrazos. Debajo de la ventana había un 991 descapotable con techo de lona precioso.

Pusimos algo de música y empezaron a fumar, había demasiada luz y era un cuarto pequeño. La gorda guapa (Carola) vivía en el piso de abajo. Me tiré en un butacón y abrí un vino. Marlene era francesa. Estaba de Erasmus, no se que coño estudiaba, no la entendí. Estudiaba pollas, eso era seguro. Carola era recepcionista donde curraban Chris y mi compañero de piso.

Empezamos a jugar a los típicos juegos de beber de preguntas verdes "¿Has follado alguna vez con una francesa? Yo nunca he follado con un escritor" y cosas así. Mi compañero de piso iba más bebido de la cuenta y se quedó frito en una cama a los veinte minutos. El juego se estaba poniendo interesante. Carola confesó ser virgen y Marlene aseguraba ser muy puta. Hablamos de tríos, de posturas, de cómo meterte un dedo por el culo provoca lefadas épicas y abrimos una botella de vodka. Empezamos a darle duro a la botella y acabamos los cuatro tirados en la otra cama. A mi izquierda Carola me aplastaba el brazo y a mi derecha Marlene me chupaba el cuello mientras le tocaba el rabo al otro chaval. Pedí hielo. Nadie lo trajo. Quería ver un poco de acción. Tiré a comerle la boca a Marlene y cuando estaba a medio aterrizar, le quité la cara y morreé guarro al chaval, que no sabía que coño estaba pasando. Lo vi ocurrir, la francesita se lo tomó como un reto y se tiró a la boca de Carola. Empezaron a liarse sucio, tocándose el chocho por encima de los pantalones y quitándose la camiseta. Eso quería ver. Luego la francesa me miró con cara desafiante y empezó a liarse con Chris. Carola me miraba con ojos de buena chica

-Tengo novio -me dijo.
-Un novio que no te folla.
-No vive aquí, es mexicano.
-Hay un océano por en medio, no son cuernos, ven guapa, ven.

La besé, largo y suave. Besaba bien. Besaba bien  y tenía las tetas enormes, como para meter la cabeza entre ambas y hacer "prblublubrblu" meneándola frenéticamente. Me empalmé. Cogí la mano de la francesa y la puse en mi polla. Aquello estaba empezando a ponerse tenso, me ví destrozando a polvos aquella cama de noventa con cuatro personas y media encima. Sonó un despertador como una puta alarma nuclear. Las seis y media. Chris y Carola entraban al turno de mañana.
"Cojonudo"- Pensé.

Chris se levanto de la cama con los pantalones por los tobillos y el rabo fuera, empalmado. Se metió a la ducha. Carola se bajó a su piso a ducharse.

Me quedé a solas con la francesa, con las bragas por las rodillas y sin camiseta. Nos empezamos a liar. Llevaba toda la noche mirando las pedazo de tetas que tenía, todas blanquitas con la piel super tersa. Se las comí como un loco. Cuando pude quitar la cara de sus tetas, las miré. Redondas, perfectas, con los pezones rositas y durísimos. No hay cosa que me de más asco que unos pezones oscuros. Le toqué el coño. Mojadísima. Tenía ya el rabo fuera cuando entró Chris.

-Todo el mundo fuera, que si llego tarde me cortan los huevos.

Los huevos no lo se, pero a mi me cortó el rollo. En la calle llovía y a mi la lluvia me pone meditativo, no me invita a joder. Sabía que para cuando llegase a mi casa no me iba a apetecer.

Cogí la botella de vino que quedaba y salimos de su cuarto, Carola no había salido todavía así que decidimos esperarla en la escalera. Mi compañero de piso se fue a casa haciendo eses. Le oí vomitar a lo lejos. El automático de la escalera se apagó. Marlene me cogió del rabo, me bajó los pantalones y me dio un enorme lametón en los huevos.

-Coño eso ha estado bien.

Dijo algo en francés que no entendí, con voz de "me gusta el semen" y empezó a chupármela. Me dio un poco de cosa, estábamos en la puta escalera y tenía que salir la gorda en cualquier momento. La tía la chupaba bien, joder, tenía arte. Y me iba a quedar sin saber cómo follaba. Siguió chupándomela y dijo otra cosa en francés que tampoco entendí. Me corrí como un animal. Le dí en el paladar, o algo, porque empezó a toser y se le salió un poco de lefa por la nariz. Abrió la puerta de la calle corriendo y echó una enorme potada.

Cogí un paraguas que había a la entrada y me fui a casa. Me disgusta cuando me estoy corriendo y paran de golpe a vomitar o hacer cualquier mierda de esas.