9.23.2013

Putas de los Lectores #1. Cristina 19.

Día 5: Me he dado cuenta de que "Todasmisputas" me esta afectando cuando salgo un fin de semana y al terminar la noche me digo: 
-"Tío, creo que lo que ha pasado hoy es una historia de PUTAS". Muy pronto sabréis porqué.


Todo se desarrollo como un sábado cualquiera hasta que en el garito, me presentan a Cristina.
-Hola, soy Cristina.
Rubia, guapa de cara y con una sombra de pecas en las mejillas. Buenas tetas y culo de sobra para embestir sin miramientos.
-Hola, Nands. Encantado.
Un poco pasada de peso para mi gusto. No importa, no iba a ser sibarita esa noche. No cuando su carita de niña buena me estaba mirando con ojos de estoy mojando bragas cuando terminamos de darnos dos besos.

Bailando y hablando me confiesa que le gustan los videojuegos y que quiere probar el ultimo de moda por las fechas. Le aseguro que lo tengo en casa y a las 3.30am acepta venir a jugar. Todos sabéis ya como debería acabar la noche.

Saliendo del garito por mi cabeza pasaba hacer magia con los dedos y alguna comida de coño suave. Suave, sí, soy un caballero y me gusta generar confianza. Pienso en correrlas del gusto y joderlas después, antes que en darles fuerte una vez y dormir.
Si hay algo que me pudiera gustar más que comerme un coño recién salido de la ducha es ver la cara de guarras y escuchar los gemidos que caracterizan a cada hembra mientras tu antebrazo trabaja a las mismas revoluciones que un motor de gasolina y pensar:
-" No te hacia corriéndote y gimiendo de esta manera ".

Pudo ser un final de fiestas más digno de historia cuando aparecieron dos amigas más y mi imaginación derivo a orgía, en su defecto trío, ya que a otra de sus amigas a la que le propuse a machete venir a jugar a casa dijo que por ella perfecto. 
En contraposición la otra pava dijo que no tenía ganas de jugar a nada y quería ir a casa a dormir.

Tertulia de zorras. Zorreo de zorras que me jodieron las expectativas de hasta un cutre y pobre misionero cuando entre risas de hiena que lleva tentando la carroña un buen rato, Cristina, me dice que su amiga se queda a su casa a dormir y se siente "culpable".
“ ¿¡Culpable!?. Cógeme los cojones con las manos y mira como pesan, a eso se le llama culpa, puta " pensé para mis adentros. Se largaron y me sentí como una mamada a medio terminar. No puedes empezar a chuparme el rabo y antes de salpicarte decir "estaba jugando". No señoritas, eso no se hace, y  muchas os preguntáis por qué, respetuosamente, os llamamos zorras.

Así se desarrollaron los hechos y al final solo me quedó la conclusión de:”Creo que esta máquina esta algo oxidada. ¿He perdido facultades?". Posiblemente si, posiblemente no he sido lo suficientemente hijo de puta”. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario